ANAÏS FLORIN
UN BARRIO PARA VIVIR
Intervención textual que habla del barrio desde el barrio, de forma positiva. El proyecto está compuesto por 7 piezas instaladas en diferentes lugares del espacio público de San Cristóbal, 7 fragmentos de toldos desechados y reutilizados sobre los que se pueden leer 7 contundentes frases.
Los toldos en desuso fueron cedidos de manera desinteresada por fábricas de la zona; se decidió utilizar la parte estampada, que es la que, a pesar de ser la más estética, generalmente no se ve desde la calle sino desde el interior de las viviendas o comercios donde están instalados.
Los textos provienen en parte de fragmentos de canciones de un grupo de jóvenes de Villaverde, compuestos de manera colectiva en un taller dirigido por la rapera Erika Dos Santos, así como de lemas y consignas utilizados en luchas vecinales y encontrados en el archivo de la Asociación Vecinal La Unidad de San Cristóbal. La idea es dar voz a las gentes de este territorio, de manera literal: no hablar por ellos, sino permitirles ser los sujetos activos protagonistas que son. En palabras de la artista, “la intención es alinearse con el deseo de la Mesa Comunitaria de alejarse de los tópicos negativos que existen sobre el barrio y que no reflejan la realidad de su vida diaria, la convivencia y las potencialidades que se dan allí, esa "constelación solidaria" que mueve y genera tantas cosas desde sus inicios”.
Un barrio para vivir pretende potenciar los aspectos positivos de San Cristóbal, haciéndolos visibles en el espacio público, con una estética que mezcla lo kitsch y las pancartas reivindicativas.
ANAÏS FLORIN (Francia / Valencia)
Su práctica artística se inscribe principalmente en el ámbito de lo contextual, prestando especial interés a los relatos, memorias y luchas asociadas a las transformaciones territoriales.